En un mundo donde el uso y aprovechamiento eficiente de los recursos es cada vez más importante para retrasar y, como meta final, detener los efectos del cambio climático, la aplicación de la economía circular es indispensable para enfrentar los retos del futuro e innovar sin dejar de lado la sostenibilidad.
¿Qué es la economía circular?
La economía circular es un modelo de producción, consumo y aprovechamiento de los recursos basado en las siete “R”: rediseñar, reducir, reutilizar, reparar, renovar, recuperar y reciclar, cuya finalidad es usar los materiales y recursos naturales existentes durante el mayor tiempo posible.
Este modelo sostenible, centrado en el bienestar social sin dejar de lado el beneficio económico, apuesta por reutilizar y en su defecto reciclar los materiales cuando la vida útil del producto original se acabe, llevando a cabo estos procesos con el menor impacto posible al medio ambiente.
Este nuevo planteamiento de consumo está basado en imitar los ciclos de la naturaleza, en la que los desechos de unos se convierten en el alimento y sustento de otros seres vivos, optimizando de esta forma los recursos disponibles y manteniendo su valor durante el mayor tiempo posible.
Lineal vs Circular
En el sistema de consumo planteado por la economía circular pasamos del enfoque de economía lineal dominante, basado en la extracción, fabricación, utilización y eliminación de los recursos, a un enfoque circular en el que estos son extraídos, fabricados y utilizados la mayor cantidad de veces posibles a través del diseño y manufactura eficiente de productos.
El sistema de economía lineal fomenta el consumo a corto plazo bajo la premisa de que disponemos de recursos de forma infinita y barata; el ciclo es básico:
- Una empresa produce un producto.
- Los usuarios lo compran y utilizan.
- La empresa saca una nueva versión del mismo producto.
- Los usuarios desechan el producto anterior y compran el nuevo.
- El ciclo inicia de nuevo.
Una de las industrias en donde se puede observar el ciclo de consumo lineal con mayor claridad es en la tecnológica, ya que con cada innovación lograda en productos como teléfonos celulares, computadoras y similares, el tiempo de vida y los ciclos lineales de consumo son cada vez más cortos.
En contraste, el modelo de economía circular, más sostenible, busca que todos los elementos de un producto original puedan reaprovecharse de manera continua en diferentes etapas:
Principios de la economía circular
Ya que la economía circular apuesta por el uso continuo de un producto en detrimento del consumo continuo de nuevos productos, es necesario cumplir una serie de principios para aplicarla correctamente:
- Preservación y optimización de los recursos naturales.
- Eco-concepción, es decir, la creación de productos considerando el impacto ambiental que generarán durante su producción y su tiempo de vida.
- Más de un uso o la reintroducción en el circuito económico de los productos que ya no satisfagan las necesidades iniciales del consumidor.
- Reparación de productos dañados o con fallas antes que la compra de uno nuevo.
- Reutilización de materiales convertidos en residuos, lo que convierte los desechos en recursos que pueden volver a ser utilizados.
- Reciclar para volver a usar materiales potencialmente útiles y evitar el desgaste de las materias primas.
- Uso de energías renovables en la producción de productos, bienes y servicios.
- Ahorro de energía a través de la conversión de residuos no reciclables en algún tipo de energía.
- Ecología industrial y territorial o la organización en un mismo territorio para gestionar más eficientemente los flujos de materiales, energía y servicios.
- Economía de la funcionalidad o fomentar el uso por encima del consumo de corto plazo.
Economía circular vs reciclaje
Aunque algunas personas piensan que este modelo es similar al reciclaje, la realidad es que la economía circular ataca de raíz el problema de los residuos a través de la creación de un plan de uso de los materiales desde el inicio de su vida útil.
Por lo tanto, pensar que economía circular significa reciclar es un error, pues mientras un sistema busca el uso continuo de un producto, el otro simplemente apuesta por la creación de uno nuevo a partir del reciclaje de otro que fue desechado sin lograr su máximo aprovechamiento.
En conclusión, aunque ambos sistemas tienen como objetivo la reducción de los residuos y por lo tanto de su impacto ambiental, existen diferencias muy relevantes entre ellos:
| Economía Circular | Reciclaje |
| Es un modelo económico | Es una estrategia de manejo de residuos |
| Busca el uso continuo de un producto | Transforma el producto en otro nuevo |
| Genera, rediseña y mantiene el valor de las cosas | Degrada el valor del producto |
| Su objetivo es la eliminación de los residuos | Su objetivo es la reutilización de los residuos |
Como lees, es necesario entender la diferencia entre un producto que conserva su valor a lo largo del tiempo y otro que pierde su valor original al ser transformado para crear o formar parte de uno completamente diferente.
En resumen, aunque el reciclaje puede ser parte de la economía circular, su uso no es necesario para que este sistema funcione y el ideal es evitar llegar a este proceso, pues implica la generación de residuos.
Beneficios de la economía circular
Reducción de costos
Una de las ventajas de reutilizar los productos en lugar de crearlos desde cero es la baja en los costos de producción, para las empresas, y la baja en el precio de venta, para los consumidores.
Conservación de los recursos naturales
Gracias a la extensión del tiempo de vida de un producto y la reutilización de componentes para la producción de otros nuevos, la aplicación de la economía circular permite la conservación de los recursos naturales.
Cuidado de la naturaleza
Los principios de generación de energía mediante el uso de residuos y de creación de procesos de producción y consumo sostenibles hacen posible la preservación del medioambiente.
Eliminación de residuos
La aplicación sistemática de la economía circular haría posible la reducción de la cantidad de residuos en los basureros y controlaría la emisión de gases de efecto invernadero.
Economía circular en México
El 17 de noviembre de 2021 se aprobó en México la “Ley General de Economía Circular”, cuyo objetivo central es reducir el impacto ambiental derivado de las actividades económicas, minimizar el desperdicio de materiales y el consumo de materias primas a través del reciclaje de los residuos y la promoción de la reutilización y la asociación industrial para transformar los desechos generados por una industria en las materias primas de otra.
Además, esta ley plantea los siguientes incentivos para promover su aplicación:
- Fondos para fomentar la investigación y el desarrollo.
- Incentivos fiscales para promover el desarrollo y uso de las tecnologías y productos que favorecen la economía circular.
- Prioridad en el otorgamiento de créditos para proyectos que ahorren energía, agua, tierras y materiales.
- La creación de una política de precios que contribuya a la conservación y utilización de los recursos.
- La imposición de cuotas para el vertido de desechos.
El Ejecutivo Federal, a través de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), es el encargado de aplicarla y brindar las herramientas necesarias para transitar hacia modelos de producción y consumo centrados en la no generación de residuos.
Desafíos de la economía circular en retail en México
Los desafíos de la economía circular para la industria retail en México son básicamente los mismos que para la mayoría de las industrias, ya que están directamente relacionados con la reorientación de la producción, el consumo y la gestión de recursos, tomando en cuenta las condiciones particulares de nuestro país, para crear condiciones que favorezcan su implementación:
- Se requiere alinear los principios de protección ambiental planteados en la “Ley de Economía Circular” con las regulaciones y políticas en otros ámbitos para promover estrategias multidimensionales.
- Adaptar al entorno mexicano las estrategias implementadas en otros países para lograr que estás funcionen en el entorno productivo y cadenas de valor del país.
- Lograr la integración del sector informal en el proceso, ya que es un actor indispensable para la recuperación y revalorización de materiales secundarios.
- Conseguir la participación y el compromiso de todos los sectores: gobierno, academia, iniciativa privada y sociedad.
Conclusiones
Es urgente poner en marcha el modelo de economía circular en México, ya que diariamente se entierran 130 mil toneladas de residuos (vidrio, aluminio, plástico, papel, cartón, etc.), lo que genera una gran liberación de gases de efecto invernadero y contamina los mantos acuíferos, además de significar un considerable desperdicio económico.
De forma simplificada, en la economía circular un producto es más valioso mientras menos contamine y más reutilizado sea sin alterar su estado original, por lo tanto su aplicación requiere un cambio sistémico de las industrias y de la forma en la producimos, consumimos y desechamos.
En este sentido, en México este modelo ya se aplicaba en algunos proyectos gubernamentales e industriales, incluso antes de la creación de la “Ley General de Economía Circular”, pero su adopción generalizada y la toma de conciencia de los consumidores continúan siendo retos desafiantes.
En la División Comercial de Vivo estaremos atentos a oportunidades para implementar la economía circular en aplicaciones diarias. Por lo pronto, hemos tomado la sostenibilidad como un pilar principal de nuestras operaciones mediante la vinculación con asociaciones civiles e instituciones gubernamentales para el fomento y apoyo a campañas de reforestación y programas de emprendimiento, la instalación de placas solares e iluminación LED, reciclaje de residuos y planes de mantenimiento preventivos que prolonguen la vida de herramientas y equipos, como parte de una agenda en la que tenemos aún mucho por explorar e implementar.
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